Caprabo y Humana han recuperado más de 125.000 kg de ropa usada durante el 2018

La cadena de supermercados Caprabo y la fundación Humana recuperaron más de 128.551 kg de ropa durante el pasado año a través de los más de 33 contenedores de Humana ubicados entre todos los supermercados de la enseña. De esta manera, han contribuido con el medioambiente evitando la emisión de más de 400 toneladas de CO2 a la atmósfera.

Todo el material irá destinado a las tiendas Humana “Fundación Pueblo para Pueblo”, donde todo este recurso, tendrá una segunda vida. Tras el gran número de donaciones de ropa recogida en Caprabo, demuestra la confianza de la ciudadanía en un modelo de gestión de este recurso con una finalidad social consolidando una relación que nació hace diecisiete años.

Un porcentaje de los recursos derivados a la gestión de este textil usado, se destina a diversos proyectos de carácter social, más concretamente a huertos sociales. El pasado curso, el proyecto al que van destinados los beneficios se denomina ASSíSVerd, un programa  formativo laboral, dirigido por ASSíS Centre d’Acollida, institución que trabaja para mejorar la calidad de vida de todas aquellas personas en riesgo de exclusión social en Barcelona, atendiendo sus necesidades básicas, proporcionándoles soluciones habitacionales además de ofrecer diversas actividades formativas y ocupacionales como por ejemplo a través de jardines y huertos urbanos.

La franquicia de supermercados Caprabo y Humana colaboran desde hace diecisiete años en la recogida de ropa usada a través de los supermercados de la enseña. Por otra parte, Humana coopera en las actividades que Caprabo desarrolla en el marco de la Semanas Europea de Prevención de Residuos con el objetivo de sensibilizar a los clientes sobre el consumo responsable y el valor que puede aportar alargar la vida de la ropa además de evitar el desperdicio de alimentos.

En palabras de Ana González, Responsable de RSC y Medio Ambiente de Caprabo “Agradece la colaboración con Humana y la participación de sus clientes en todos aquellos proyectos que permiten financiar los huertos sociales a nivel local como aquellos que fomentan la capacitación y reinserción socio laborales de aquellas personas sin hogar.”

Mientras que Àgata Soler-Roig, Responsable del Área de Recogida de Humana en Cataluña valora positivamente la recogida selectiva añadiendo que “Cada vez hay más interés por parte de la ciudadanía, e instituciones para reducir la cantidad de residuos y alargar la vida de la ropa que está en buen estado disminuyendo el volumen de residuos generados además de poder recuperar materias primas”.  Todo ello, se realiza para dotar a estos recursos de una finalidad social que convierte al territorio en un motor de progreso.
 

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