Durante las últimas décadas las franquicias se han convertido en parte de nuestra rutina diaria y es por esto mismo que muchos deciden emprender bajo este sistema.
El crecimiento de dicho modelo responde en gran parte a la elevada demanda en muchos sectores del mercado, a la alta competitividad de marcas y a la globalización, presentando una situación económica de múltiples oportunidades y de crecimiento.
No obstante, gestionar una franquicia es todo un reto, que requiere de habilidades profesionales y personales específicas e imprescindibles para triunfar siguiendo este modelo de negocio.
Claves de éxito en la gestión de franquicias
Recogemos aquí varios apartados que aseguran el éxito de los futuros franquiciados:
- Identificación con la filosofía de la marca. Uno de los pilares fundamentales para desarrollar una unidad franquiciada es conocer la esencia de la enseña, incluyendo no sólo sus valores, misión y visión, sino también los protocolos existentes.
- Gestión económica óptima. Abrir un negocio siempre es una inversión, por lo que es crucial que sepas administrar el dinero que destinas a cada cosa. Asimismo, el mundo de las franquicias está en constante evolución, por lo que deberás de disponer de liquidez para poder mejorar tu tienda y no quedarte atrás ante las nuevas tendencias.
- Enfoque orientado al cliente. Si quieres triunfar es imprescindible que tus clientes estén satisfechos y sólo hay una manera de conseguirlo: ofrecer un producto y servicio adaptado a sus gustos y necesidades.
- Capacidad de adaptación. Emprender puede ser un camino de espinas si no conoces bien donde te mueves, por ello es esencial que te adaptes a los cambios que surgen y que sepas aceptar los retos y desafíos del día a día.
- Preparación previa y elección acertada de la ubicación: Antes de iniciar todo el proceso, debes conocer a tu público, la marca y la inversión necesaria para evitar las improvisaciones.
- Gestión efectiva: Una de las claves del éxito de cualquier negocio es gestionar todos los procesos en los que se implica una empresa, incluyendo el funcionamiento diario, la gestión de costes, la optimización de operaciones, las ventas, etc.