La historia de llaollao, ejemplo de emprendimiento

Durante el Día Mundial del Emprendimiento, celebrado el día 16 de abril, llaollao ha hecho un llamamiento a la importancia que tiene crear e integrar nuevos negocios que aporten valor a la economía, para así fomentar la motivación y el espíritu emprendedor. 

Con lo cual, la conocida enseña de yogurt helado, ha tomado como referencia su propia historia, que es un fiel reflejo de la actual situación para poner en marcha un proyecto empresarial propio. Según los datos, el pergil emprendedor en España se sitúa en edades de entre 25 y 34 años, edad en la que Pedro Espinosa fundó llaollao. Fue durante 2009, en plena crisis económica, cuando Pedro Espinosa, CEO y fundador de llaollao, apostó por una idea innovadora e introdujo un nuevo concepto de restauración en el mercado español. 

 “Cuando escuchamos la palabra emprendimiento, inevitablemente la asociamos a riesgo o incertidumbre. Es cierto, salir de tu zona de confort y renunciar a un trabajo estable (e inicialmente también a una nómina o unos ingresos fijos a final de mes) da mucho vértigo, pero si lo compensas con confianza, esfuerzo, determinación, y, además, te sientes seguro con la decisión tomada, emprender es realmente reconfortante. Soñar y hacer realidad una novedosa idea, tu idea, eso compensa todo”, afirma Pedro.

Una vez que Pedro Espinosa tuvo claro su concepto, inauguró su primer establecimiento de yogurt helado en Denia. Obtuvo tanto éxito, que la mayor parte de su trabajo al principio se basaba en hacer números y atender a las múltiples peticiones de franquicia. Aunque contaba con los conocimientos necesarios, Pedro señala que se trata de un proceso complejo y que “ser emprendedor, aunque tengas ese carácter innato y esa inquietud desde siempre, se hace, no se nace siéndolo. Los aprendizajes, los aciertos y errores diarios, te convierten en ello”.

El éxito y la innovación han formado parte de llaollao desde sus inicios, lo que ha llevado a la marca a recibir numerosos premios al emprendimiento durante sus primeros años en el sector. 

“Para emprender el primer paso es no tener miedo a hacerlo, tener mucha capacidad de trabajo y ser perseverante. Por mi trabajo viajaba bastante a Estados Unidos y allí tuve la ocasión de probar un producto que aún no estaba desarrollado en España: el yogurt helado. El concepto me gustó y lo vi como una oportunidad de innovación en nuestro país.” Afirma Espinosa.

“Y fue en ese momento cuando tocaba crear nuestra propia receta, dotarlo de calidad máxima, nutricionalmente equilibrado, sabroso y atractivo para todos los públicos. Apostamos por hacerlo 100% personalizable gracias a la infinidad de toppings con los que realzar su sabor, y así surgió nuestro yogur helado”. Continúa señalando el CEO de llaollao.

Después de 13 años de la apertura de la primera tienda de llaollao, la enseña se ha convertido en una de las marcas con mayor nivel de crecimiento nacional e internacionalmente. En la actualidad, su red de puntos de venta asciende a 130 en España, además de contar con presencia en 21 mercados internacionales como El Salvador, Malasia, Indonesia, Suiza, Singapur, Estados Unidos, Australia o Brunéi, entre otros.

Reinventarse es un factor esencial para Pedro Espinosa, quien afirma que es necesario seguir aprendiendo sin perder el foco en las personas: “Trabajamos para poner en el centro al cliente y al empleado. Esto es clave para poder romper barreras de entrada y no sólo conseguir nuevos clientes, sino convertir los que tenemos en prescriptores de los valores y nuestra filosofía, más allá de ser consumidor de un producto.”

Así pues, llaollao es toda una referencia en el ámbito de la franquicia, y un ejemplo de emprendimiento en restauración tras haber impulsado un proyecto creado en base a la oferta de un producto único y diferenciado: el yogurt helado. 

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