¿Os gusta trabajar en Adaix?
Sí, en Adaix trabajamos muy a gusto. Nadie nos dice que debemos hacer o cómo debemos hacerlo, y eso hace que vayamos a nuestro ritmo. Somos conscientes que representamos una marca y que tenemos que cumplir con el Código Ético de Adaix, y cómo no, con nuestra ética personal, respondiendo siempre como profesionales ante todo.
¿Cómo llegó a vosotros la marca Adaix?
Empezamos a buscar por las webs de franquicias inmobiliarias y de seguros y nos decantamos por Adaix. Hubo varias razones, una de éstas era el tema económico que era muy razonable para alguien que empieza ya que no teníamos ningún “colchón” ni tampoco experiencia en el sector. Otra de las razones fue el trato recibido por parte de la central. Llamamos y nos atendieron muy bien, nos habló Jesús, el responsable de expansión, y quedamos encantados con el trato tan personal, claro y concreto que no dudamos de que era la mejor opción.
¿Estáis contentos con trato recibido por parte de la franquicia?
Yo personalmente me considero una persona muy exigente conmigo misma y con la gente que me rodea. Siempre podemos debatir algún asunto o algún desacuerdo como en cualquier “casa”, pero tenemos total confianza y estamos satisfechos a nivel general con el trato y funcionamiento de la Franquicia Adaix y eso es lo principal para nosotros.
Hemos visto que habéis publicado un anuncio en una revista muy importante, ¿Cómo se os ocurrió la idea?
Por casualidad, nos vino un presupuesto de un cliente satisfecho con nuestro trabajo y queríamos aprovechar la ocasión para que nos conocieran un poco mejor.
En vuestras redes sociales hemos apreciado que disponéis de una gran oficina en el centro de Palma de Mallorca, ¿Qué tal está yendo el inicio de la recuperación del sector inmobiliario?, ¿Han aumentado las ventas y el alquiler?
Nuestra labor con Adaix en el sector inmobiliario empezó en 2012. Sinceramente fue un año difícil, al igual que el 2013 (sobrevivimos gracias a los alquileres), pero aprendimos a disfrutar de nuestro trabajo logrando enfrentarnos a dificultades y tomarlas como los retos de “un juego de vida, que aparecen un día y no sabes cuando terminarán”.
Empezamos a notar recuperación y mucha mejora en el 2014 porque el 80% de los compradores ya eran españoles o residentes en España (ya no teníamos que esperar un inversor extranjero), aunque siempre queda ese pequeño miedo de nuestros residentes a la hora de comprar. Y así estamos, subiendo y bajando la cuesta.
¿Qué consejo podéis dar a los nuevos franquiciados o a aquellos que están interesados en formar parte de vuestro equipo?
Trabajar, son muchas las horas, y ser fiel a tus clientes, porque el prestigio no se compra, se trabaja.
La labor de un agente inmobiliario está muy deteriorada por las malas gestiones que se hicieron anteriormente. Hay que trabajar para que el cliente vea porque tiene que elegir una agencia y que sea tu agencia la que elija. Y efectivamente, siempre intentar dar más de lo que pide el cliente. En esta labor hay de todo, como en la vida misma.
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