La cadena de franquicias especializada en el rodizio brasileño Brasa y Leña, ha invertido 400.000 euros en dos de sus restaurantes localizados en Madrid y Vizcaya, renovando y adaptandolos bajo la nueva identidad visual de la enseña.
La remodelación de sendos establecimientos ha supuesto un coste de 200.000 euros cada uno y todo ello se enmarca dentro del nuevo concepto de la compañía con el fin de cuidar al máximo la experiencia de sus clientes y en ofrecerles una propuesta diferencial en restauración según palabras de Emilio Lefort, director de Marketing y Comunicación de la compañía.
El local de Madrid, situado en el Centro Comercial Alegran en San Sebastián de los Reyes y el local de Baracaldo situado en el Centro Comercial Max Center en Vizcaya cuentan con una superficie entorno a los 300 metros cuadrados entre la sala y terraza con capacidad de hasta 200 comensales. Con estas re-aperturas, ha permitiendo generar 30 puestos de trabajo.
La concepción que se procura transmitir con el nuevo diseño de los locales pretende dar al consumidor una experiencia y ambiente único para degustar el auténtico rodizio brasileño. Espacio. Los cambios realizados integran espacios ampliados, un incremento de iluminación, nuevos colores y acabados, mobiliario variado, y un nuevo asador que mantendrá un reclamo visual para el público.
En estos momentos la cadena de Brasa y Leña dispone de 27 restaurantes establecidos por todo el país, de los cuales 17 son gestionados en propiedad alcanzando una facturación media de 1 millón de euros por local. La compañía cuenta con la experiencia de una familia ligada a la industria cárnica con más de 40 años y desde su fundación en el año 2008 en plena crisis se ha posicionado como la primera enseña especializada en restauración brasileña a nivel europeo.
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