En el siguiente reportaje analizamos el sistema de franquicias y te contamos las claves por las que es una oportunidad franquiciar un negocio.
Hablamos de franquiciar un negocio cuando una empresa decide ceder los derechos de imagen y uso de su marca, a través de un contrato comercial, a una persona interesada en explotar o desarrollar la actividad a la que se dedica la marca.
No existen dos empresas iguales, y tampoco dos franquicias, es por eso que el franquiciador debe de tener claras las características que diferencian a su modelo de negocio en el mercado porque posteriormente será una de sus fortalezas como marca.
“La franquicia es un sistema basado en la experiencia y es una nueva forma de crecimiento de las empresas, ya que por un lado permite minimizar los costes de la inversión por parte de la empresa al abrir nuevos establecimientos, y por otro lado, permite implantar el negocio en zonas a las que por medios propios es más difícil llegar. Es un sector en el que el tamaño actual o potencial de la competencia, las economías de escala que se producen o el propio crecimiento experimentado, obliga a plantearse a sus protagonistas la fórmula de expansión a través de la franquicia”, afirma Laura Acosta, Responsable de Desarrollo de Negocio de Tormo Franquicias.
Hoy en día, la franquicia es uno de los pocos sistemas de negocio que le permiten a una empresa crecer en un breve periodo de tiempo. Se trata de un sector de actividad en auge, y está presente, cada vez más, en el ámbito de la economía y los negocios.
Estos son algunos de los aspectos por los que franquiciar un negocio:
- Sistema consolidado. Son muchas las empresas que operan en el mercado a través del régimen de franquicia. Además, es un sector que está en continuo crecimiento, aumentando su volumen de establecimientos franquiciados cada año, alcanzando, actualmente, los 55.000. Cada año se llevan a cabo unas 4.000 nuevas aperturas de franquicias, confirmando que es un sistema sólido y bien estructurado en el mercado.
- Sólida red de establecimientos. El principal propósito de una empresa es conseguir crear una amplia red de establecimientos de su marca y estar presente en distintas zonas de la geografía, es por eso que la franquicia, le permite al franquiciador disponer de varias unidades de negocio con una imagen y operativa homogénea, atención al cliente personalizada y campañas de marketing y publicidad globales para todos los locales franquiciados de la marca.
- Variedad de sectores. Se puede decir que todos, o casi todos, los sectores están presentes en el ámbito de la franquicia, lo que confirma que es un sistema de negocio que funciona y se adapta a todo tipo de negocio.
- Marcas de éxito en franquicia. Grandes marcas del mercado, como McDonald’s, Carrefour o Zara que cuentan con presencia en varios países del mundo, también han apostado por la franquicia para crecer más rápido en su sector. Por lo tanto, es un indicio de que la franquicia es un negocio que minimiza riesgos económicos y ayuda a una marca a crecer en un corto periodo de tiempo.
- Mayor innovación. Crecer de la mano de franquiciados, permite que el franquiciador utilice los márgenes de beneficio de sus franquicias para reinvertir en su negocio, ya sea en imagen, nuevas tecnologías, etc.
Franquiciar es una decisión estratégica de cada empresa, “en la que todo tiene que estar muy bien estructurado, para poder replicar el modelo de negocio en otras ubicaciones, y depende tanto de la marca como de la actividad empresarial que la empresa se pueda ver afectada tanto positiva como negativamente al franquiciar. Es un proceso que se debe realizar seria y concienzudamente, como especialistas en la materia, nuestro consejo imparcial es que cada empresa debe asesorarse por profesionales en franquicia”, apunta Acosta.
A la hora de empezar a franquiciar un negocio, el franquiciador debe elaborar un Proyecto de Franquicia, en el cual se desarrollarán los aspectos más importantes del negocio. Este proyecto se estructura en tres partes: el Plan Estratégico de Franquicia, donde la empresa analiza la viabilidad económica de proyecto y define los requisitos a cumplir de cada una de las partes; lo siguiente es desarrollar la Base Documental, todos los documentos necesarios para llevar a cabo la estrategia de franquicia como son el dossier de la franquicia, el contrato y los manuales operativos; por último está la Expansión, parte en la que el franquiciador comienza a buscar candidatos para la apertura de franquicias.
Un modelo de negocio para todo tipo de empresas
La oportunidad de franquiciar se puede dar en todo tipo de empresas ya sean de pequeño tamaño donde los propietarios del negocio ven la ocasión ideal para crecer a través de la franquicia, emprendedores que franquician una idea o un nuevo modelo de negocio, fabricantes que quieren ampliar su red de distribución o grandes empresas con una estructura bien asentada que tengan dificultades para llegar a distintos emplazamientos y que vean en la franquicia una alternativa para aumentar su presencia en el mercado.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la franquicia es el auténtico motor de crecimiento de cada empresa franquiciadora y sin la incorporación de franquiciados, una empresa no genera ingresos. Por eso mismo es que franquiciar un negocio no se trata sólo de incorporar franquiciados, sino de añadir a la red de franquicias a aquellos que tengan el perfil que se ajuste a las aptitudes necesarias para el tipo de negocio y la capacidad económica requerida.
Aun así, la franquicia no impide que la empresa crezca de manera propia, como negocio independiente de las unidades franquiciadas, es más, cada franquiciador puede reservar zonas determinadas para su propia expansión. “Muchas marcas crecen por ellas mismas a la vez que lo hacen sus franquicias, se puede hacer de diferentes maneras, pero la realidad es que solo en franquicia podemos asegurar la presencia de nuestras marcas en nuevos emplazamientos”, concluye la Responsable de Desarrollo de Negocio de la consultora Tormo Franquicias.