TBO Snack & Dinner nació en el año 2003 como un negocio
familiar, a raíz de la experiencia y formación que habían adquirido esta
familia durante 4 años de trabajo en una marca del sector de la hostelería y
restauración. Después de estudiar la apertura de un negocio propio, se pusieron
manos a la obra con el objetivo de crear un restaurante que estuviera al
alcance de todos. Durante su experiencia trabajando en el sector de la
hostelería y restauración, estudiaron las preferencias de sus clientes con el
objetivo de crear un negocio que se adaptara a todos los consumidores.
En el año 2005 esta familia arrancó con la apertura de la
franquicia TBO Snack & Dinner, que tuvo una gran acogida entre el público,
por ese motivo, en el año 2010 decidieron expandir su negocio a través de la
fórmula de la franquicia.
El servicio a domicilio, que según la central representa el
40% de la facturación, supone una de sus señas de identidad y permite fidelizar
a los clientes. Otros elementos característicos de la franquicia TBO Snack
& Dinner son: excelente relación calidad-precio, y unos locales acogedores,
modernos y familiares.
Todo ello configura un concepto de fast food pensado para
inversores que buscan un negocio que tenga una alta rentabilidad, como también,
para emprendedores que quieran gestionar su propio negocio.
El franquiciado, a quien se pide que cubra al menos el 40%
de la inversión con recursos propios, accede a formación exclusiva para el
correcto desempeño de cada puesto de trabajo.
Esta transmisión de conocimientos o Know-How, se realiza en
Zamora, en el local franquiciado, con el apoyo de tres personas. En paralelo,
desde la enseña contemplan un plan de marketing agresivo que se implementará en
los inicios de cada unidad.
Desde la central se fija un plan de pagos que facilita al
asociado la puesta en marcha de la actividad. La amortización del desembolso
inicial se calcula en aproximadamente un año y medio.
