Loco Polo es un proyecto diseñado para facilitar por igual
las necesidades tanto del consumidor como del franquiciado. Desde la matriz se
ha trabajado durante meses en la elaboración de un producto y modelo de negocio
únicos hasta la fecha en el mercado debido a la cremosidad y los rellenos de
los polos. Además, el hecho de ser naturales, artesanos y aptos para todo tipo
de intolerancias, se ha logrado que el público general no sólo haya aceptado el
producto, sino que lo demanda de más a más. También cabe destacar la
espectacularidad con la que se expone en unos carros o vitrinas diseñadas a
medida para Loco Polo.
El valor añadido de esta franquicia es lo que se supone
debería ser el punto débil, la estacionalidad. Son muchas las franquicias del
sector heladero que sufren en invierno por la caída de las ventas. En este
caso, desde Loco Polo se propone la explotación de Pop-Ups durante los meses de
calor en forma de corners o carros, que es cuando más se trabaja. Este formato
muy visual, ubicado en zonas de mucho paso de gente hace que las ventas sean
muy elevadas durante los meses de calor, pudiendo guardar el punto de venta en
un almacén los meses más fríos tras haber vendido docenas de miles de unidades
en la temporada alta. Hasta la fecha, Loco Polo ha probado este modelo de
negocio en lugares tan dispares como San Sebastián, Bilbao, Barcelona, Madrid,
Sevilla o Huelva, siendo todos casos de éxito y ningún de pérdidas.
El franquiciado debe interesarse en nuestra franquicia Loco
Polo porque solamente va a trabajar los meses de calor, de 3 a 8 meses en
función de la ubicación geográfica del punto de venta en el país. Aseguramos
que los meses de mucho trabajo serán duros principalmente por el alto volumen
de venta de unidades, recepción de género, control de personal y otros
factores, pero, tras el verano, el resultado será muy positivo y permitirá a nuestros
franquiciados poder descansar y dedicarse a otras cosas sabiendo que tiene el
año muy bien cubierto en lo que a ingresos se refiere.
Tenemos dos perfiles. El primero es el pequeño emprendedor
que quiere lanzarse al mundo de los negocios, pero no tiene mucho dinero. Con
30.000€ de inversión totales, puede tener su punto de venta Loco Polo,
gestionarlo durante los meses de temporada alta cobrándose un sueldo y
dividendos tras el cierre de temporada. A esto lo llamaríamos autoempleo.
El segundo perfil es el del empresario medio que pueda
invertir en 4-5 puntos de venta poniendo personal y ganando un buen dinero tras
el verano. La estimación es que con una inversión igual a la de una tienda,
este modelo puede generar desde la misma hasta un 100% más de rentabilidad que
una tienda con 5 carros en 4 meses fuertes de trabajo.
Crea tu propio perfil, encuentra la franquicia que mejor se adapta a tus preferencias y mantente al día de todas nuestras novedades.